La Salle - Gran Vía.

...Como fuente de anécdotas, mi ex - colegio no tiene desperdicio y aprovecho la oportunidad para comentar algunas.

...-Yendo a 1º de B.U.P. formé un grupo de amigas con chicas que veía solitarias de varias clases y nos caímos muy bien en seguida, nos juntábamos en el recreo y con alguna me hice más amiga ya que iba a mi misma clase. Lo malo fue que al final del curso, todas se pusieron de acuerdo en decirme que era mejor que me abriera a más gente y que formara nuevos amigos dejándome plantada del grupo. Lo curioso fue que el profesor de Griego del año siguiente me vio como colgada en clase y me dijo que me iba a presentar gente muy maja para que me juntara con un grupo y cuál fue mi sorpresa cuando me llevó a conocer a las chicas que me habían echado el año anterior :P El pobre no tenía idea de nada con lo que delante de ellas le dije que no era necesario que ya las conocía y después le conté lo que me habían dicho unos meses antes, le agradecí el detalle pero le dije que más le valía no haberse molestado, que hay gente que parece encantadora y luego sale como sale...

...-Otra anécdota fue con el profesor apodado "el Capas". Este hombre me dijo a final de C.O.U. que me aprobaba su asignatura porque ya había suspendido a mi hermano el año pasado y le parecía mal suspenderme a mí también, así que yo, haciendo gala de mi educación le dije tal que: "Gracias hermano, no esperaba menos de Usted" y me di media vuelta y me fui. No sé si pillaría el doble sentido de la frase, pero no me preocupó, la verdad :P y lo más gracioso de esta anécdota fue la continuación ya que el hombre quería hablar con mi madre en plan tutoría y supuse que era para ecirle lo mismo, como que era benévolo aprobándome y similares (cosa falsa porque mi examen estaba aprobado y bien sin necesidad de que el hombre me ayudara) así que se lo dijje a mi madre y fue. Y mi madre que es de lo mejor del mundo mundial, tras hablar con él salió algo disgustada de su forma de ser y como es muy bien quedá como se dice por Andalucía, le pregutó al hombre por su estado de salud, más concretamente por su garganta. El hombre le dijo que tenía una afección y que los alumnos le hacían bromas sacudiendo la tiza de los borradores y que le costaba respirar pero que por lo demás bien y mi madre que no se corta un pelo (¿A quién me pareceré?) le dijo que no era una afección sin más, que tenía cáncer de garganta y que estaría muerto de entonces a tres años y efectivamente a los tres años dicho profesor murió (¡Qué ojo clínico tiene mi madre!).

...-Otra anécdota extra fue el corte de digestión que me dio también en C.O.U. un día justo a la hora del recreo. Yo iba hacia el bar donde jugábamos varios amigos trampeando la máquina del pac - man con permiso de los dueños del bar a cambio de tomar una consumición cuando me empezó a doler el estómago cosa mala. Salí corriendo al baño y llegando a la puerta me dio tiempo justo de abrirla para vomitar en el lavabo y acto seguido fui al despacho del Coordinador de C.O.U. para pedirle una fregona y limpiar el estropicio. Tras contarle lo sucedido hizo que mi compañera de pupitre, Natalia, me acompañara a casa y que me tomara una manzanilla para asentar el estómago y que me quedara allí. La chica muy amable no puso objección y me preparó la manzanilla. Yo me tomé la temperatura y estaba a 39'5 y ya me encontraba mucho más despejada que cuando estaba en el colegio. De nuevo fui al baño a vomitar y luego ya me quedé bien. Ella se marchó y no me dejó que fuera con ella pero al cabo de un rato volví a clase, ya que me encontraba bien y aún llegaba a tiempo de no perderme las clases (Es lo bueno que tiene el vivir a 5 minutos del colegio a paso lento). Mi profesor cuando me vio me dijo que le habían dicho que me encontraba mal y que antes era la salud que cualquier otra cosa pero yo le dije que no, que en ese colegio la salud era algo secundario, que importaba más el no tener faltas en clase, aunque fueran justificadas. El profesor se quedó callado y empezó la clase como si no hubiera pasado nada.

...-También en C.O.U. tuve otra anécdota. estando en teatro una mañana de sábado, vino el Coordinador de C.O.U, a hablar con mi profesor de teatro en el descanso de la clase y acto seguido Félix, mi profe me dijo que me fuera con Pedro, el Coordinador. Yo me quedé extrañada pues no había hecho nada raro y témí por una mala noticia. Pero al llegar a su despacho Pedro me dijo que no, que no tenía nada que ver el que me huvbiera llamado sino que quería saber por qué no me había apuntado a la cena de despedida de C.O.U. que organizaba el colegio. Yo le dije que era muy cara para mí y que tampoco es que me llevara muy bien con la gente como para hacer cena y guateque luego porque aunque me llevaba bien con los de mi clase nomalmente iba con gente más pequeña que eran los que realmente eran mis amigos y que no iban a estar en la cena. El hombre lo comprendió, pero me dijo que le hacía ilusión que fuera todo el mundo a la cena ya que era yo la única de todo C.O.U, que no iba. Le dije que lo sentía pero que no me interesaba así que me dijo que el Colegio me invitaba a la cena y que por favor que fuera. Yo accedí, pero al salir por la puerta me giré y le dije: "Pedro, el Colegio no me invita, me invitas tú, verdad?" Pedro se quedó mirándome y no dijo nada y le dije que no se preocupara que iría igualmente a la cena. Lo que él no sabía era lo que le haría cada lunes por la mañana hasta el día de la cena en cuestión. Como había que pagar con mes y medio de antemano la cena, me dediqué a ir todos los lunes a su despacho y darle mis 1000 pesetas de paga (500 de una abuela y 500 de la otra) durante las 5 semanas anteriores a la cena hasta que le pagué toda la deuda. El primer lunes le sentó fatal y me dijo que no quería mi dinero y le dije que lo aceptara o que no iría, que una cosa era que no me interesara la cena y que no tuviera dinero como para pagarla de golpe pero que ahorrando mi paga podía ir y que no me gustaba que me compraran aunque fuera por una tontería. Sé que no es que el hombre me comprara pero tampoco me parecía bien aprovecharme de él e ir de gorra a la cena y al baile por muy caro que fuera (Hay que tener en cuenta que de esto hace ya más de 14 años con lo que 5000 pesetas era muuucho dinero). Al menos en la cena me lo pasé bien. El Colegio había organizado antes un festival de fin de curso y luego habían repartido chicos con chicas asignando un chico por chica que regalaba a madre e hija (que iban también las madres al festival) una rosa y quedaba encargado de que si la chica se aburría él estuviera pendiente de la chica que le tocara para entretenerla mientras tanto. Y conste que aparte del mozo hubo más gente que me pidió salir a bailar y me dio conversación. Eso sí, cuando se acabó el baile y la gente dijo de salir de bares yo dije que me iba a casa y como era la primera y el Coordinador de C.O.U. y el Director del Colegio también se iban a dormir al piso que tienen junto al Colegio me acompañaron casi hasta casa. Digo casi porque fui yo quien insistió que no era necesario dejarme en la puerta, que me dejaban a una manzana de casa y ellos ya desviaban hacia su piso.